En la mira

Bomba nuclear en Washington

 

Un vehículo en pleno Times Square, en Nueva York, estuvo a punto de explotar.

Diversas “coincidencias” permitieron que la policía actuara a tiempo, desactivara el explosivo y finalmente, también gracias a una cadena de sucesos inesperados, lograra la captura del individuo, de origen paquistaní, que había colocado el vehículo con los explosivos. Lo bajaron del avión en que escapaba.

El suceso nos lleva a rememorar una preocupación que persiste desde los atentados del 2001: ¿Qué tan fácil sería, para Al Qaeda, o alguna otra organización terrorista, hacer explotar un artefacto nuclear en Estados Unidos?

El tema es investigado y analizados sus posibles escenarios por las agencias de inteligencia gubernamentales de esa nación, igual que lo hacen en algunos países europeos, como Inglaterra.

Uno de los jefes de la organización que se menciona declaró hace poco que iba a haber varios atentados importantes en los próximos días en Estados Unidos. Los hechos demuestran que no mentía y que los de Al Qaeda tienen intenciones de cumplir la advertencia.

Pero, ¿cómo podría estallar en ese territorio una bomba nuclear?

Los pasos a dar por los terroristas tendrían que ser los siguientes:

1.- Contratar un especialista.

2.- Conseguir material nuclear para armar la bomba.

3.- Trasladar los componentes a los Estados Unidos. Sería más fácil, para no ser descubiertos, que emplearan la vía terrestre, por lo que México y Canadá son seguros lugares de tránsito para llevar al cabo el plan.

4.- Una vez en Estados Unidos cualquier cosa y en cualquier momento puede suceder.

¿Cuáles serían los posibles objetivos?

Washington y Nueva York, y/o alguna otra ciudad de las que cuentan con mayor población. El atentado podría ocurrir en varias ciudades a la vez, como sucedió en 2001.

Suponiendo que su objetivo fuera Washington y dado que ya ha habido quienes se han metido hasta la Casa Blanca (afortunadamente sin consecuencias, hasta ahora), el desastre sería terrible.

Lo siguiente sería la reacción de los Estados Unidos.

En este caso, los escenarios también son tremendos.

Todo esto, evidentemente, explica las fuertes medidas de seguridad que se están tomando y otras que algunos quieren que se tomen para prevenir un atentado.

Una bomba nuclear deja destrucción y muertes inmediatas, pero las secuelas también son catastróficas y sin duda quedaría afectada una amplia zona e inhabitable, por las radiaciones, la ciudad objetivo.

¿Qué es lo ideal en este caso?

Claro, acabar con las organizaciones involucradas antes de que cumplan sus amenazas.

¿Lo lograrán?

La pregunta queda en el aire.

 

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